Agradezco que hayan hecho caso a mis comentarios sobre cómo empezar los capis. Tras la cutrez de Bonnie en el anterior, en este tenemos a Damon. Y no vistiéndose, sino duchándose, que es mucho mejor. Ya podían seguir mis sugerencias en cuanto a Tyler, Klaus o Stefan, la serie ganaría más aún. Pues aquí tenemos al Salvatore con una sonrisa de oreja a oreja pasándose la alcachofa con el cuerpo… y cambiamos a la versión femenina de Rocky Balboa venida un poco a menos: Elena pegando leches a un saco de boxeo. Para poner eso, podrían haber seguido con la otra escena. Alaric entra y por cómo está atizando los puñetazos y las patadas, debe ser algo gordo. Pregunta que si quiere hablar de ello pero Elena le dice que no hay nada que decir. Se ve que aprendió a mantener la boca cerrada de lo que pasa con Damon después de lo de Caroline, y a Alaric ya le dijo en el 3x02 que no sabía lo que estaba haciendo, como para soltarse sobre lo de anoche.
Damon sale del baño justo cuando Stefan entra para decirle que se dé brillo, que han quedado con la bruja y llegan tarde (cómo si fuera importante hacerla esperar a esa). Sorprendido por la felicidad que desprende, Stefan intenta averiguar qué le pasa a Damon, que no para de mirarle con esa sonrisilla tan… tan suya, vamos. Lógicamente, esquiva tener que responderle, aunque hubiera sido un puntazo comprobar qué cara pondría Stefan si se enteraba, sabiendo con seguridad que Katherine anda por ahí en un spa mientras él tiene que hacer de segurata de los ataúdes. Sería muy FOREVER ALONE, le viene niquelado.
Ric no se rinde e indaga en lo que tiene a Elena tan exaltada. Posiblemente sea el efecto de todas las duchas frías que debió de darse, ya que dice que no pegó ojo. Al profesor le ocurrió igual, efectos secundarios de la resurrección lo llaman, y precisamente por eso mismo, Elena cree que Jeremy debe irse puesto que como al anillo se le agoten las pilas… se acabó lo que se daba. Tras el último patadón a lo De Jong (el tío de Holanda que practicó artes marciales con Xavi Alonso), la Gilbert dice que está canalizando la frustración, que traducido significa que está desfogándose por no haber impedido que Damon se fuera del porche. A continuación, Alaric habla de que Jeremy está contento con lo de irse a un tuto nuevo (especializado en emos, no vaya a ser que se vuelva normal), y que la hipnosis de Damon había funcionado. Hombre pues claro, por qué no iba a funcionar si se alimenta de sangre humana, empaquetada, sí, pero se supone que cuando no furulan es si es de animal. Total, que es oír su nombre y a Elena le entra el tembleque, ya podría habérsele caído el café y la escena habría sido brutal. Nerviosa, le pregunta que si ha hablado con él hoy, Alaric responde: “No, ¿por qué?”. Mosca que se ha quedado… “No, por nada”, responde Elena, ante la mirada del profesor.
Damon sale del baño justo cuando Stefan entra para decirle que se dé brillo, que han quedado con la bruja y llegan tarde (cómo si fuera importante hacerla esperar a esa). Sorprendido por la felicidad que desprende, Stefan intenta averiguar qué le pasa a Damon, que no para de mirarle con esa sonrisilla tan… tan suya, vamos. Lógicamente, esquiva tener que responderle, aunque hubiera sido un puntazo comprobar qué cara pondría Stefan si se enteraba, sabiendo con seguridad que Katherine anda por ahí en un spa mientras él tiene que hacer de segurata de los ataúdes. Sería muy FOREVER ALONE, le viene niquelado.
Ric no se rinde e indaga en lo que tiene a Elena tan exaltada. Posiblemente sea el efecto de todas las duchas frías que debió de darse, ya que dice que no pegó ojo. Al profesor le ocurrió igual, efectos secundarios de la resurrección lo llaman, y precisamente por eso mismo, Elena cree que Jeremy debe irse puesto que como al anillo se le agoten las pilas… se acabó lo que se daba. Tras el último patadón a lo De Jong (el tío de Holanda que practicó artes marciales con Xavi Alonso), la Gilbert dice que está canalizando la frustración, que traducido significa que está desfogándose por no haber impedido que Damon se fuera del porche. A continuación, Alaric habla de que Jeremy está contento con lo de irse a un tuto nuevo (especializado en emos, no vaya a ser que se vuelva normal), y que la hipnosis de Damon había funcionado. Hombre pues claro, por qué no iba a funcionar si se alimenta de sangre humana, empaquetada, sí, pero se supone que cuando no furulan es si es de animal. Total, que es oír su nombre y a Elena le entra el tembleque, ya podría habérsele caído el café y la escena habría sido brutal. Nerviosa, le pregunta que si ha hablado con él hoy, Alaric responde: “No, ¿por qué?”. Mosca que se ha quedado… “No, por nada”, responde Elena, ante la mirada del profesor.
Bonnie con sus misas en latín intenta abrir el ataúd famoso pero ni de lejos, así que paga sus frustraciones con la pobre caja. Podría también morirse junto a Stefan si ve que tal, ahora que son compinches. De repente, nota algo raro en el ambiente y se dirige a la puerta. Afuera, llegan los hermanos y Stefan pregunta a Damon que si no le dijo a Elena lo de los ataúdes, éste responde que no, que ya se lo dijo, y Stefan le recalca que quería asegurarse puesto que proteger la ubicación de la familia klausiana es su principal prioridad. Un inciso: Osito prepotente, quien le iba con el cuento a Elena de las cosas eras tú, no Damon, que como buena persona en olvidar lo que no interesa está el 2x18 donde perdiste el culo para comerla la oreja con el plan que tramó junto a la Bennet, así que no hables de ser bocachancla. Sigamos. El presentimiento de que algo no va bien también lo tiene Damon, y justo cuando la bruja llega a la puerta, le ve bajando por las escaleras, haciéndola la seña de que se calle. Un híbrido era el polizón que tenían y al enfrentarse a Stefan, le es arrancado el corazón, segunda de Damon Salvatore para matar peña.
Con motivo del cumpleaños de Caroline, Elena decora la taquilla suya con floripondios y matasuegras. Bonnie se presenta tarde alegando que ha estado trabajando en unos spells y se la chamuscó el reloj. Elena le dice que tiene que contarla algo que no le gustará. Yo pensaba que iba a cascarle lo de Damon pero de ilusiones también se vive, y resulta que es lo de Jeremy, que por compelling se va del pueblo hasta que el jula pase a mejor vida, y al no solucionar su historia, pues que se lo decía para que despidiese si quería.
Damon apalea el ataúd para abrirlo pero está más cerrado que un colegio el mes de agosto. Haciendo la cuenta de los originales, 3 de las cajas deberían contener hermanos del primaveras y la última puede que contenga lo que matará a Klaus. Stefan sugiere que teniendo a los híbridos pegados a su culo, se les viene el chiringuito abajo, y tienen que hacer algo con ellos. Damon le advierte que mejor que se esté quieto, no sea que por empezar a repartir leches, se descubra todo. Sin embargo, el pequeño de los Salvatore tiene el día chulo (¿el día sólo?) y afirma que no se va a estar amedrentándose cuando tiene a Klaus cogido por los kinder, que si hace falta manda vía UPS los ataúdes a darse un lavado en el océano y se acabó lo que se daba. Damon le recuerda que entonces, comienza la revancha por parte del híbrido cepillándoselo (eso seguro, antes de cargárselo, se lo chasca) y al resto de personas, incluido él (Damon). Stefan asegura que el original está de farol, que su familia le importa más que otra cosa, y ante la pregunta de su hermano de que si está seguro, le dice que no lo sabe, que sólo hay una forma de saberlo, ir a buscarle las cosquillas. Vamos, totalmente suicida, aunque ya puestos, podría ponerse él en primera línea de batalla para que le maten. Por eso Damon le avisa de que si le quiere dejar en evidencia, tiene que estar dispuesto a perderlo todo si se equivoca, es decir, que a unas malas, Klaus le mate y entonces para qué tanto rollo de haberlo salvado antes. Stefan se va. Más tonto y no nace.
En el instituto, Bonnie se acerca al emo para hablar con él de lo de Denver y le dice que le dolió lo que pasó entre él y Anna (venga ya, te puso los tochos con un casper, te sentó como una patada en el culo and we all know it). Pero el chaval está ilusionado con su nuevo destino, que mientras no se arregle el tema de Klaus, allí podrá tener una vida mejor. La bruja puntúa que son las mismas palabras que Elena dijo, y eso deja sorprendido a Jeremy, pero luego lo maquilla con que simplemente es una pena que tenga que irse de manera que al emo no le da para sumar 2 2.
En su ya conocido Ford Fiesta, Caroline llega al instituto y Tyler está esperándola. Ella no quiere hablar con él, pero el chico le dice que entiende que no pueda estar con él, que por más que quiera ponerla en primer lugar, es imposible deshacerse del vínculo klausiano y nunca lo conseguirá (eso es porque no tienes lo superpoderes especiales de Stefan que por segundos evitaron la compulsión, eres un esbirro de segundo nivel). Le da su regalo de cumpleaños (una pulsera, cosa muy común por lo que veremos) y se va.
En su nueva chozaca, Klaus despide a Rebekah en otro ataúd (para mí que deben de hacerle un descuento especial en la funeraria por haber comprado tantos). La Rihana chunga se la lleva para su cuarto y Stefan se aparece por allí, para informar que no le gustan los amigos híbridos por el pueblo y quiere que se den el piro (si bueno, a mí tampoco me gustas tú, y me tengo que aguantar). Klaus le dice que esperaba que una vez liberado pudieran continuar su amistad donde lo dejaron (amistad, seguro), pero está dolido por lo que ha hecho. Stefan replica que un amigo no le priva de libre albedrío a otro, a lo que el jula reconoce que eso fue un poco extremo pero que se pone de mala leche de vez en cuando y se le zumba el panchito (como si normalmente fuese cuerdo). Ahora solamente desea recuperar a sus brothers, pero el Salvatore le amenaza con sacar a los híbridos él mismo como los vea andorreando por esos lares. Terreno peligroso está tocando… porque Klaus vuelve a usar la baza de cargarse gente y montar la de San Quintín. A Stefan le importa tres pitos todo y en el caso de que lo hiciese, lo mismo lleva a Elijah a conocer el océano Ártico, aunque luego el original se la devolviera haciéndole perder a su hermano. A unas malas, Klaus tiene varios, pero Stefan sólo uno, más le vale ponerse a contar bien. Entre sonrisillas maléficas, se desafían a ver quien tiene más ego, y la que acaba pagando el pato es la híbrida descabezada a lo Sleepy Hollow, dando muestras Stefan de que no está tirándose el farol.
Recién llegada a casa, Caroline se topa con Bonnie, Elena y Matt, quienes le dan la sorpresa de su cumple, en vista de que prohibió organizar cualquier cosa y tuvieron que improvisar esto. Ella les agradece el gesto pero no quiere saber nada de celebraciones porque nunca cumplirá más años, así que festejarlo para nada, es tontería. Elena no se rinde y dice que tiene otra idea.
El ñarigón se presenta en casa de su papaíto, que le pide que debe echar un cable para frenar a Stefan, que está tocando demasiado las narices (¿no le querías tanto? Pues te lo comes con papas). Tyler le dice que coja a otro de los híbridos para que haga el trabajo sucio, que bastante tiene con ser el apestado de la pandilla. Klaus le ordena que muerda a Caroline para que demuestre su lealtad pero el subordinado rehúsa hacerlo. Sin hacer uso de su posición como original (porque recordemos que Michael lo dijo, los híbridos al ser mitad vampires se les chuta con el ojo y a tirar), el julandrón asegura que encontrará otra forma de achantar a Stefan.
De camino a una reunión del Consejo, Alaric comenta a Damon no entiende que si Stefan le salvó la vida, como es que se arriesga a que Klaus le pueda matar, que qué pasa con el interruptor, ¿está encendido o apagado? (para mí que lo tiene electrificado). Damon expresa su incertidumbre en cuanto a lo lejos que puede llegar su brother puesto que lo mismo casca alguien. Alaric le pregunta: “¿De repente te importa quien vive y quien muere?”, y Damon responde que tiene una pequeña lista (tan pequeña que como mucho está Elena y el propio Ric).
La idea que tuvo la Gilbert es ir al cementerio para hacer el funeral de la antigua Caroline y dar la bienvenida a la nueva. Suelta un discursito con los logros de la rubia y a empinar el codo con tequila. Cualquier hijo de vecino tendría que tener un mechero o cerillas para encender las velas, pero a estos no les hace falta con Bonnie y sus dotes de Zippo andante. Parece que al cerrar los ojos se va a rajar como los barcos viejos y siendo el sitio tan pequeño… yo les veía llamando a los bomberos.
Se organizó una recaudación de fondos para el puente donde Elena tuvo el accidente con sus padres y mientras Damon y Alaric observan la maqueta, el segundo le pregunta al primero que si sabe lo que le pasa a Elena. Damon escurre el bulto proponiendo que tendrá que ver con Stefan y se va a echarse otro trago, firmar el cheque de donación y listo. Seguro que al girarse puso cara triunfante diciendo por lo bajo: “La tengo loquita”. Por la retaguardia, llega la Dr. Fell y tras otro flirteo con Alaric le espeta el tema vampírico y éste se queda to loco, pero ella le aclara que pertenece a una familia de fundadores y por lo tanto está al corriente. Y más coqueteo hasta que Mederith pregunta por Damon, siendo la que le empujó a donar. Según cuenta, un tío británico está dispuesto a donar el doble de lo que recauden para restaurar el puente. La cosa huele a Klaus, y efectivamente es así, puesto que está peloteando a la alcaldesa. Damon se acerca para saber porqué le esta lamiendo el culo al tío que arruinó la vida de su hijo, y Klaus contraataca que liberó a Tyler del sufrimiento de la transformación, y le da por ser empático. Carol Lockwood dice a Damon que Klaus se ha comprometido a proteger al pueblo y a su hijo, pero el Salvatore matiza que los que amenazan son precisamente los mutantes de él. En vista de que Stefan no soltará las cajas ni con agua caliente, Klaus le pide a Damon que impida que vaya tomándose la justicia por su manos decapitándolos porque sino el Consejo irá a por él.
En la cripta, Caroline envía un sms a Tyler pero Elena la pilla y tiene pinta de echarla la peta. De repente, Bonnie salta diciendo que no puede estar controlando lo que hace todo el mundo, y que no debería haber obligado a Jeremy a irse. Elena se defiende afirmando que así puede tener una vida medio normal, pero la bruja replica que él tiene que decidir por sí mismo cómo vivir, nada de quitarle la libertad de elección. Si bueno, cuando a ella no le gusta algo, chuta la migraña esa y ahí te las ves y te las deseas, por lo que debería mirárselo un poquito. Por suerte, se termina largando. No tengo claro de parte de quien ponerme en esto, pero fue gracioso ver a Bonnie rebelándose.
La sheriff y Damon charlan sobre la táctica de Klaus, y aunque tenga a Carol en el bote, no permitirá que se salga con la suya. La cosa es que tampoco puede quedarse de brazos cruzados ante el concurso de echar el meo más grande entre el híbrido y Stefan, así que de momento lo que ve más factible es que detenga a Stefan de montar un pifostio.
La Devitto discute con un tío que resulta ser un ex y Alaric les interrumpe para ver qué pasa. Él le advierte que ella está un poco mal del tarro, a lo que el profesor le suelta que si es de los que van pidiendo que les hagan una reconstrucción dental en cero coma. Mensaje pillado, se larga. Mederith cuenta que es el médico que tiene el Consejo para poner en los ataques “Causa de la muerte: ataque de animal”. La suena el móvil y se despide.
Llega Stefan a la fiesta y qué mejor manera de demostrar su agradecimiento que cogiendo un cuchillo para probarlo en un híbrido, aunque al ir a cortarle la cabeza su hermano lo evita. Damon le echa la bronca porque aun matando a los que tenga en la casa, Klaus puede hacer más sin problemas, puesto que Elena sigue siendo humana. Stefan dice que la protección de ella ya no es su problema, que no está hipnotizado para hacerlo. Espera, que me están entrando unas ganas asesinas muy chungas. ¿Ahora es problema de Damon que a Elena no le pase nada? Te equivocas tío, eso lo ha sido siempre, mientras tú te dedicabas a mirar a las musarañas o la foto de Katherine. Y lo de que no está obligado… ¿qué pasaba antes de que oyeras el nombre de Klaus? Damon da en el clavo: “Tu interruptor está frito, como tu cerebro”. Si quiere ganar al jula, tiene que ser listo (empezamos mal, osito no anda muy boyante en eso), sin embargo, Stefan piensa que la solución es ser mejor malo que él. ¿Mejor tú que Klaus? No sé, para mí sois igual de pedantes, pero si quieres ser mejor en eso…
Tyler aparece en el funeral y las caras mustias de Matt y Elena hablan por sí solas. Carol sale afuera para hablar con él y Elena pregunta a Matt que si está bien, a lo que él contesta que sí, que sólo quiere que Caroline y todos sean felices dentro de la zumbada de vida en la que están estancados. Majete, dices estancados como si tú hubieras evolucionado como los pokemons. Elena reconoce que Bonnie tenía razón, que no debería manipular la mente de su Jeremy, pero no sabía qué hacer y no está dispuesta a perder a nadie más.
El napias asegura a su novia o lo que sea que Klaus no le puede controlar cuando se trata de ella, pero Caroline le dice que no pasa nada, que debe ser que no estaban destinados a estar juntos y que pasar página es lo mejor (vamos, lo que yo llevo diciendo desde el 2x07 que empezaron a meter el tyroline). No obstante, Tyler no está de acuerdo y la dice que la quiere. Se besan y en una de estas que la cosa comienza a caldearse, ¡zas! jaletazo que te crió. Es decir, inconscientemente al tener la orden de Klaus, la ha mordido aunque él no sintiera que es lo correcto como decía en otras cosas que ha hecho. De nuevo, me regodeo en ello. Ahora sí que se os terminó el chollo.
Elena y Matt salen a buscar a Carol ya que entre que se les acabaron las bebidas y que poco se tienen que contar, para qué estar ahí con silencios incómodos. Son sorprendidos por Stefan, que deja fuera de juego a Matt y se lleva a Elena a dar un paseo en modo rally. Damon la llama al móvil pero Stefan la quita el teléfono y le dice a su hermano que va a hacer su próximo movimiento, que no es otro que changar a Klaus el parimiento de mutantes. Damon le pide que a Elena no la meta en el lío, aunque decide hacer caso omiso lanzando el móvil por la ventanilla. Genial, no solamente se desentiende de su seguridad sino que encima la pone en peligro. Te estás coronando, colega.
Viendo la burrada que está a punto de cometer Stefan por unas malditas cajas, Damon llama a Klaus para informarle de que va a usar a Elena en contra suya, que se deje de melindreces y de boleto a los híbridos. El primaveras está seguro de que no le hará nada pero Damon no las tiene todas consigo, porque Stefan intentó cargar a un bicho de esos en mitad de la fiesta. Klaus afirma que por muy tronado que esté “ese tipo de amor nunca muere” y va de farol. Perdona esquizofrénico, tú estás comprado por la Plec, ¿verdad? En fin, que Damon le recomienda hacerle caso en lo que pida, porque le conoce mejor que nadie y no sabe hasta qué punto es capaz de llegar.
Matt trae a Carol a su casa con los síntomas de las mordeduras tales como alucinaciones, a la vez que Stefan le confiesa a Elena su gran estrategia: convertirla para impedir que Klaus siga haciendo de las suyas. Ella le grita que pare el coche pero Stefan pone el manos libres al Iphone para que el jula se vea con el agua al cuello. Vuelve a decirle que retire a sus esbirros y éste otra vez que los ataúdes son de vuelva. Así podríamos tirarnos toda la noche sin sacar nada. Finalmente, Stefan amenaza con estrellar el coche en el puente Wickery no porque vaya a matarla, bueno sí, pero no definitivamente, sino a transformada y tenemos a Katherine 2.0. Después de eso, va la familia klausiana. Los segundos pasan y al no obtener respuesta, Stefan pisa el acelerador a fondo hasta que en se oye a Klaus decir que ha ganado. Se supondría que frenaría pero no, otros pocos segundos y tiene que chillarle que pare el coche.
Elena sale disparada y con lagrimones le reprocha que cómo ha sido capaz de hacerle algo así, para colmo en el mismo sitio donde murieron sus padres y ella casi también, lo sabía de buena tinta puesto que fue él quien la salvó. Entonces Stefan juega la baza de que Klaus tenía que picar por lo que su cague debía ser creíble (esto me suena… ah sí, la estrategia de Damon para en el 2x18 simulando la muerte de Bonnie, vamos, que el ceño no tiene invención ni para buscarse justificaciones propias, eso sí, la diferencia es que a Damon nunca se le pasaría por la cabeza usarla de cebo y mucho menos de esa manera tan cruel). Ha funcionado y es lo que importa, ya que sabiendo su debilidad, se le puede destruir. Elena, flipándolo más todavía, pregunta que si después de todo lo que más importa es eso y Stefan contesta que es lo único que le queda. Entonces ella dice “Me tenías a mí”, pero él afirma que la perdió en el momento en que se fue del pueblo, simplemente que no se había admitido a sí misma el aceptarlo. Ya sabemos que en estado de negaciones, Elena tiene un master, sí, y puede que con esto Stefan o se esté refiriendo al hecho de que tras los meses de desenfreno, no puede retomar la rutina del mártir de la noche a la mañana (recordamos que Lexi tardó 30 años en una de sus crisis), o quizás esté aludiendo al delena aunque no haga mención explícita a ello (que podría hacerlo para variar, y cambiar su argumentación ya que antes sólo le motivaba rollo de culpar a Damon). Era inevitable que tras su partida, ellos se acercaran y no olvidemos que en el 3x06, durante la hoguera, Stefan vio celosa a Elena por la escena de su hermano con Rebekah, una prueba tangible 100%. Recuperar su humanidad no hace más que martillearle la conciencia porque sabe que lo tiene más negro que mi futuro. Por eso creo que habría estado curioso, y de paso veríamos que salida improvisada se le ocurre a Elena, pero vale, con lo que acaba de pasar no la meteremos más presión que se empana para adentro. La chica cree que todo lo que está haciendo es intentar que ella le odie y Stefan dice que ya no le importa lo que piense de él. De nuevo, voy a descogorciarme……. JA JA JA. Ya está. No he dicho nada en otros momentos de la conversación pero aquí tengo que explotar. Stefan, me recuerdas al Sawyer del 5x08 echando ese discursito a Horace, donde no es verdad de la primera palabra hasta la última (“¿Son 3 años suficientes para olvidarse de alguien? Por supuesto”). Has tenido varias caras en las que solamente te faltaba abrir el maletero del coche, coger la manta de cuadros para picnics y echarte a llorar en la cuneta. Que no te importa lo que Elena piense de ti no te lo crees ni jarto de mojitos de sangre. Sinceramente, no sé qué pretendes con estas salidas de mal gusto de transformaciones en puentes y mierdas varias, si es el que Elena abra los ojos (tampoco creo que tras el capi pasado hiciera falta), que te estaque o que como eres tan sacrificado y ves lo que te vas a comer dentro de… ya, en un futuro quieras tirarte el rollo vendiendo la baza de “no me sentía merecedor… por eso lo hice…” y demás verborrea a la que nos tienes acostumbrados. Podrías tener algo de estilo y educación para estas cosas, después de todo, eres el hermano bueno, digo yo. Ah no, que lo dijiste tú. Total, que coge el coche y ya si eso que Elena vuelva al pueblo a dedo. Esta es la escena desgarradora de la que Nina habló que no ha sido ni la mitad de lo que se suponía que sería, si acaso una décima parte. Pronto empieza a chochear esta mujer…
Klaus se presenta en casa de la sheriff porque Tyler le contó lo que pasó y el animalico estaba tan mal… su maestro ha venido a ayudar. Matt le espeta que él hizo que sucediera y el jula se las ingenia para que la madre le deje pasar a cambio de su apoyo. Me veo a Liz con dardos tranquilizantes buscando a Stefan por el pueblo en menos de lo que canta un gallo. Klaus entra en la habitación de Caroline y ella cree que va a matarla. “¿En tu cumpleaños? ¿Tan mal piensas de mí?”. Se supone que tú eras el original más temido, ser considerado en algo así es como esperar a que los políticos sean honrados. Claro, esta chica no te ha visto el lagrimal tan sensible que tienes, sino no te lo habría preguntado. Klaus se disculpa puesto que lo suyo era un daño colateral, nada personal. O sea, discierno que la orden a Tyler era para presionar a todos a que fuesen a Stefan a darle la chapa, y luego la curaría de todas formas. No sé, si su idea era usar a la rubia como intentó con Jeremy, no vendría mal que supiera que los guionistas han decidido omitir la relación Stefan-Caroline gratuitamente.
A continuación, le dice a la moribunda que tiene que ajustar la percepción del tiempo puesto que no es como la de los humanos, pero a Caroline le da lo mismo porque para lo que la queda. Entonces, Klaus dice de que a lo largo de su existencia ha pensado que su vida no tenía sentido una o dos veces (podría ser más consecuente con sus pensamientos y haberse guillotinado). Le da la oportunidad de escoger si vivir o morir, que puede conocer grandes ciudades, el arte, la música y tendrá todo, junto con mil cumpleaños. No es por menospreciar, pero esas cosas a Carol le importan cero, hubiera servido algo así de famosos, fiestas y despiporre. Lógicamente, Klaus habla con la pertinente congoja que le sigue haciendo más patético por momentos, pero que sirve para que Caroline opte por curarse. Más hachazos para las tyrolines, quienes se creían que todo el campo era orégano y Matt no valía un duro. Que os aproveche el jula.
Otra cosa de esas que omiten y son cagadas del sentido común, Damon por ciencia infusa fue a buscar a Elena al puente. Llegando a casa de ella, le pregunta que si va a estar bien y contesta que sobrevivirá, que de un modo u otro siempre lo hace. Entonces Damon, en lugar de tomar ventaja de la aberración que acababa de hacer Stefan, dice que puso a Klaus contra las cuerdas y eso les hizo tener un punto a su favor, aunque Elena prefiere que se meta sus métodos por donde le quepan. Pero Damon se siente un pelín orgulloso ahora que ha dejado de ser una plañidera ambulante. Vuelve a decirla que si estará bien mientras la coge la barbilla con la mano y previendo que después del 1 viene el 2… “No puedes besarme otra vez”. Ya estamos, cortando el tema al personal. Vamos a ver, hija, párate ya de ser siesa, que no cuela, y con esas caras menos. Venga vale, la reacción inicial es siempre la misma, no puedo evitarlo, me sale espontáneamente. Es cierto que el horno no está para bollos, y el propio Damon lo sabe. Elena sigue con lo que no puede, que no está bien, que la tiemblan las piernas y no sé qué historias más. Damon comprende la situación y decide no forzar la máquina, de momento. Baja las escaleras y Elena se mete para adentro, aunque esta vez mira cómo se va, no vaya a ser que le dé otra vez por darse la vuelta, que tiene que prepararse.
Al día siguiente, Jeremy está preparado para irse, despidiéndose de su hermana cuando llega Bonnie. Elena se huele que cascará por soleares pero no, simplemente le da un abrazo y ambas le ven marcharse. Me da lástima, un personaje menos al que criticar.
Recuperada, Caroline despierta y la herida del cuello ha desaparecido. En su mesita hay una caja rectangular negra con un lazo blanco. Regalo de Klaus, a ver cómo te comes eso sin que te entre disentería. Es otra pulsera, por lo que brilla bastante más cara que la de Tyler tiene que ser, pero lo más probable es que haya salido gratis como el resto de bienes que está obteniendo aquí el menda.
Vuelta al puente, donde Elena está con Matt reconociendo que se siente atrapada por estar aferrándose a la chica que debía haber muerto junto con sus padres, aquella con vida normal y que no se enamoraba de vampiros. Con S de Sevilla, plural, por si alguna elefan no lo tiene claro. Gracias. La suerte que tiene es que el pobre Matt está realmente out de todo esto y como si mezcla churras con merinas. Cerrando etapas, tiran unas florecillas al agua y Elena respira tranquila. Un momento necesario a pesar de que así en primera instancia me chocó ver a Matt. Supongo que relacionándolo con la antigua Elena, acepto la licencia.
En el Grill, Alaric toma un copazo tras mandar al emo a Denver, sumándosele Mederith, diciendo que su excusa para beber de día es que perdió un paciente. Sí sí, paciente. Es el pseudónimo para ex-novios que tocan las narices. El equipo de la sheriff acudió ante una llamada al bosque y junto con Damon ven el cuerpo. Él cree que lo que tiene clavado es una estaca pero Liz le dice que no es ni híbrido ni chupasangre. Un asesinato de los de toda la vida a un humano. Veremos que pasa con esta tía, que como en sus ratos libres tenga estas aficiones… ¡¡¡¡¡¡Alaric cárgatela!!!!!
Damon apalea el ataúd para abrirlo pero está más cerrado que un colegio el mes de agosto. Haciendo la cuenta de los originales, 3 de las cajas deberían contener hermanos del primaveras y la última puede que contenga lo que matará a Klaus. Stefan sugiere que teniendo a los híbridos pegados a su culo, se les viene el chiringuito abajo, y tienen que hacer algo con ellos. Damon le advierte que mejor que se esté quieto, no sea que por empezar a repartir leches, se descubra todo. Sin embargo, el pequeño de los Salvatore tiene el día chulo (¿el día sólo?) y afirma que no se va a estar amedrentándose cuando tiene a Klaus cogido por los kinder, que si hace falta manda vía UPS los ataúdes a darse un lavado en el océano y se acabó lo que se daba. Damon le recuerda que entonces, comienza la revancha por parte del híbrido cepillándoselo (eso seguro, antes de cargárselo, se lo chasca) y al resto de personas, incluido él (Damon). Stefan asegura que el original está de farol, que su familia le importa más que otra cosa, y ante la pregunta de su hermano de que si está seguro, le dice que no lo sabe, que sólo hay una forma de saberlo, ir a buscarle las cosquillas. Vamos, totalmente suicida, aunque ya puestos, podría ponerse él en primera línea de batalla para que le maten. Por eso Damon le avisa de que si le quiere dejar en evidencia, tiene que estar dispuesto a perderlo todo si se equivoca, es decir, que a unas malas, Klaus le mate y entonces para qué tanto rollo de haberlo salvado antes. Stefan se va. Más tonto y no nace.
En el instituto, Bonnie se acerca al emo para hablar con él de lo de Denver y le dice que le dolió lo que pasó entre él y Anna (venga ya, te puso los tochos con un casper, te sentó como una patada en el culo and we all know it). Pero el chaval está ilusionado con su nuevo destino, que mientras no se arregle el tema de Klaus, allí podrá tener una vida mejor. La bruja puntúa que son las mismas palabras que Elena dijo, y eso deja sorprendido a Jeremy, pero luego lo maquilla con que simplemente es una pena que tenga que irse de manera que al emo no le da para sumar 2 2.
En su ya conocido Ford Fiesta, Caroline llega al instituto y Tyler está esperándola. Ella no quiere hablar con él, pero el chico le dice que entiende que no pueda estar con él, que por más que quiera ponerla en primer lugar, es imposible deshacerse del vínculo klausiano y nunca lo conseguirá (eso es porque no tienes lo superpoderes especiales de Stefan que por segundos evitaron la compulsión, eres un esbirro de segundo nivel). Le da su regalo de cumpleaños (una pulsera, cosa muy común por lo que veremos) y se va.
En su nueva chozaca, Klaus despide a Rebekah en otro ataúd (para mí que deben de hacerle un descuento especial en la funeraria por haber comprado tantos). La Rihana chunga se la lleva para su cuarto y Stefan se aparece por allí, para informar que no le gustan los amigos híbridos por el pueblo y quiere que se den el piro (si bueno, a mí tampoco me gustas tú, y me tengo que aguantar). Klaus le dice que esperaba que una vez liberado pudieran continuar su amistad donde lo dejaron (amistad, seguro), pero está dolido por lo que ha hecho. Stefan replica que un amigo no le priva de libre albedrío a otro, a lo que el jula reconoce que eso fue un poco extremo pero que se pone de mala leche de vez en cuando y se le zumba el panchito (como si normalmente fuese cuerdo). Ahora solamente desea recuperar a sus brothers, pero el Salvatore le amenaza con sacar a los híbridos él mismo como los vea andorreando por esos lares. Terreno peligroso está tocando… porque Klaus vuelve a usar la baza de cargarse gente y montar la de San Quintín. A Stefan le importa tres pitos todo y en el caso de que lo hiciese, lo mismo lleva a Elijah a conocer el océano Ártico, aunque luego el original se la devolviera haciéndole perder a su hermano. A unas malas, Klaus tiene varios, pero Stefan sólo uno, más le vale ponerse a contar bien. Entre sonrisillas maléficas, se desafían a ver quien tiene más ego, y la que acaba pagando el pato es la híbrida descabezada a lo Sleepy Hollow, dando muestras Stefan de que no está tirándose el farol.
Recién llegada a casa, Caroline se topa con Bonnie, Elena y Matt, quienes le dan la sorpresa de su cumple, en vista de que prohibió organizar cualquier cosa y tuvieron que improvisar esto. Ella les agradece el gesto pero no quiere saber nada de celebraciones porque nunca cumplirá más años, así que festejarlo para nada, es tontería. Elena no se rinde y dice que tiene otra idea.
El ñarigón se presenta en casa de su papaíto, que le pide que debe echar un cable para frenar a Stefan, que está tocando demasiado las narices (¿no le querías tanto? Pues te lo comes con papas). Tyler le dice que coja a otro de los híbridos para que haga el trabajo sucio, que bastante tiene con ser el apestado de la pandilla. Klaus le ordena que muerda a Caroline para que demuestre su lealtad pero el subordinado rehúsa hacerlo. Sin hacer uso de su posición como original (porque recordemos que Michael lo dijo, los híbridos al ser mitad vampires se les chuta con el ojo y a tirar), el julandrón asegura que encontrará otra forma de achantar a Stefan.
De camino a una reunión del Consejo, Alaric comenta a Damon no entiende que si Stefan le salvó la vida, como es que se arriesga a que Klaus le pueda matar, que qué pasa con el interruptor, ¿está encendido o apagado? (para mí que lo tiene electrificado). Damon expresa su incertidumbre en cuanto a lo lejos que puede llegar su brother puesto que lo mismo casca alguien. Alaric le pregunta: “¿De repente te importa quien vive y quien muere?”, y Damon responde que tiene una pequeña lista (tan pequeña que como mucho está Elena y el propio Ric).
La idea que tuvo la Gilbert es ir al cementerio para hacer el funeral de la antigua Caroline y dar la bienvenida a la nueva. Suelta un discursito con los logros de la rubia y a empinar el codo con tequila. Cualquier hijo de vecino tendría que tener un mechero o cerillas para encender las velas, pero a estos no les hace falta con Bonnie y sus dotes de Zippo andante. Parece que al cerrar los ojos se va a rajar como los barcos viejos y siendo el sitio tan pequeño… yo les veía llamando a los bomberos.
Se organizó una recaudación de fondos para el puente donde Elena tuvo el accidente con sus padres y mientras Damon y Alaric observan la maqueta, el segundo le pregunta al primero que si sabe lo que le pasa a Elena. Damon escurre el bulto proponiendo que tendrá que ver con Stefan y se va a echarse otro trago, firmar el cheque de donación y listo. Seguro que al girarse puso cara triunfante diciendo por lo bajo: “La tengo loquita”. Por la retaguardia, llega la Dr. Fell y tras otro flirteo con Alaric le espeta el tema vampírico y éste se queda to loco, pero ella le aclara que pertenece a una familia de fundadores y por lo tanto está al corriente. Y más coqueteo hasta que Mederith pregunta por Damon, siendo la que le empujó a donar. Según cuenta, un tío británico está dispuesto a donar el doble de lo que recauden para restaurar el puente. La cosa huele a Klaus, y efectivamente es así, puesto que está peloteando a la alcaldesa. Damon se acerca para saber porqué le esta lamiendo el culo al tío que arruinó la vida de su hijo, y Klaus contraataca que liberó a Tyler del sufrimiento de la transformación, y le da por ser empático. Carol Lockwood dice a Damon que Klaus se ha comprometido a proteger al pueblo y a su hijo, pero el Salvatore matiza que los que amenazan son precisamente los mutantes de él. En vista de que Stefan no soltará las cajas ni con agua caliente, Klaus le pide a Damon que impida que vaya tomándose la justicia por su manos decapitándolos porque sino el Consejo irá a por él.
En la cripta, Caroline envía un sms a Tyler pero Elena la pilla y tiene pinta de echarla la peta. De repente, Bonnie salta diciendo que no puede estar controlando lo que hace todo el mundo, y que no debería haber obligado a Jeremy a irse. Elena se defiende afirmando que así puede tener una vida medio normal, pero la bruja replica que él tiene que decidir por sí mismo cómo vivir, nada de quitarle la libertad de elección. Si bueno, cuando a ella no le gusta algo, chuta la migraña esa y ahí te las ves y te las deseas, por lo que debería mirárselo un poquito. Por suerte, se termina largando. No tengo claro de parte de quien ponerme en esto, pero fue gracioso ver a Bonnie rebelándose.
La sheriff y Damon charlan sobre la táctica de Klaus, y aunque tenga a Carol en el bote, no permitirá que se salga con la suya. La cosa es que tampoco puede quedarse de brazos cruzados ante el concurso de echar el meo más grande entre el híbrido y Stefan, así que de momento lo que ve más factible es que detenga a Stefan de montar un pifostio.
La Devitto discute con un tío que resulta ser un ex y Alaric les interrumpe para ver qué pasa. Él le advierte que ella está un poco mal del tarro, a lo que el profesor le suelta que si es de los que van pidiendo que les hagan una reconstrucción dental en cero coma. Mensaje pillado, se larga. Mederith cuenta que es el médico que tiene el Consejo para poner en los ataques “Causa de la muerte: ataque de animal”. La suena el móvil y se despide.
Llega Stefan a la fiesta y qué mejor manera de demostrar su agradecimiento que cogiendo un cuchillo para probarlo en un híbrido, aunque al ir a cortarle la cabeza su hermano lo evita. Damon le echa la bronca porque aun matando a los que tenga en la casa, Klaus puede hacer más sin problemas, puesto que Elena sigue siendo humana. Stefan dice que la protección de ella ya no es su problema, que no está hipnotizado para hacerlo. Espera, que me están entrando unas ganas asesinas muy chungas. ¿Ahora es problema de Damon que a Elena no le pase nada? Te equivocas tío, eso lo ha sido siempre, mientras tú te dedicabas a mirar a las musarañas o la foto de Katherine. Y lo de que no está obligado… ¿qué pasaba antes de que oyeras el nombre de Klaus? Damon da en el clavo: “Tu interruptor está frito, como tu cerebro”. Si quiere ganar al jula, tiene que ser listo (empezamos mal, osito no anda muy boyante en eso), sin embargo, Stefan piensa que la solución es ser mejor malo que él. ¿Mejor tú que Klaus? No sé, para mí sois igual de pedantes, pero si quieres ser mejor en eso…
Tyler aparece en el funeral y las caras mustias de Matt y Elena hablan por sí solas. Carol sale afuera para hablar con él y Elena pregunta a Matt que si está bien, a lo que él contesta que sí, que sólo quiere que Caroline y todos sean felices dentro de la zumbada de vida en la que están estancados. Majete, dices estancados como si tú hubieras evolucionado como los pokemons. Elena reconoce que Bonnie tenía razón, que no debería manipular la mente de su Jeremy, pero no sabía qué hacer y no está dispuesta a perder a nadie más.
El napias asegura a su novia o lo que sea que Klaus no le puede controlar cuando se trata de ella, pero Caroline le dice que no pasa nada, que debe ser que no estaban destinados a estar juntos y que pasar página es lo mejor (vamos, lo que yo llevo diciendo desde el 2x07 que empezaron a meter el tyroline). No obstante, Tyler no está de acuerdo y la dice que la quiere. Se besan y en una de estas que la cosa comienza a caldearse, ¡zas! jaletazo que te crió. Es decir, inconscientemente al tener la orden de Klaus, la ha mordido aunque él no sintiera que es lo correcto como decía en otras cosas que ha hecho. De nuevo, me regodeo en ello. Ahora sí que se os terminó el chollo.
Elena y Matt salen a buscar a Carol ya que entre que se les acabaron las bebidas y que poco se tienen que contar, para qué estar ahí con silencios incómodos. Son sorprendidos por Stefan, que deja fuera de juego a Matt y se lleva a Elena a dar un paseo en modo rally. Damon la llama al móvil pero Stefan la quita el teléfono y le dice a su hermano que va a hacer su próximo movimiento, que no es otro que changar a Klaus el parimiento de mutantes. Damon le pide que a Elena no la meta en el lío, aunque decide hacer caso omiso lanzando el móvil por la ventanilla. Genial, no solamente se desentiende de su seguridad sino que encima la pone en peligro. Te estás coronando, colega.
Viendo la burrada que está a punto de cometer Stefan por unas malditas cajas, Damon llama a Klaus para informarle de que va a usar a Elena en contra suya, que se deje de melindreces y de boleto a los híbridos. El primaveras está seguro de que no le hará nada pero Damon no las tiene todas consigo, porque Stefan intentó cargar a un bicho de esos en mitad de la fiesta. Klaus afirma que por muy tronado que esté “ese tipo de amor nunca muere” y va de farol. Perdona esquizofrénico, tú estás comprado por la Plec, ¿verdad? En fin, que Damon le recomienda hacerle caso en lo que pida, porque le conoce mejor que nadie y no sabe hasta qué punto es capaz de llegar.
Matt trae a Carol a su casa con los síntomas de las mordeduras tales como alucinaciones, a la vez que Stefan le confiesa a Elena su gran estrategia: convertirla para impedir que Klaus siga haciendo de las suyas. Ella le grita que pare el coche pero Stefan pone el manos libres al Iphone para que el jula se vea con el agua al cuello. Vuelve a decirle que retire a sus esbirros y éste otra vez que los ataúdes son de vuelva. Así podríamos tirarnos toda la noche sin sacar nada. Finalmente, Stefan amenaza con estrellar el coche en el puente Wickery no porque vaya a matarla, bueno sí, pero no definitivamente, sino a transformada y tenemos a Katherine 2.0. Después de eso, va la familia klausiana. Los segundos pasan y al no obtener respuesta, Stefan pisa el acelerador a fondo hasta que en se oye a Klaus decir que ha ganado. Se supondría que frenaría pero no, otros pocos segundos y tiene que chillarle que pare el coche.
Elena sale disparada y con lagrimones le reprocha que cómo ha sido capaz de hacerle algo así, para colmo en el mismo sitio donde murieron sus padres y ella casi también, lo sabía de buena tinta puesto que fue él quien la salvó. Entonces Stefan juega la baza de que Klaus tenía que picar por lo que su cague debía ser creíble (esto me suena… ah sí, la estrategia de Damon para en el 2x18 simulando la muerte de Bonnie, vamos, que el ceño no tiene invención ni para buscarse justificaciones propias, eso sí, la diferencia es que a Damon nunca se le pasaría por la cabeza usarla de cebo y mucho menos de esa manera tan cruel). Ha funcionado y es lo que importa, ya que sabiendo su debilidad, se le puede destruir. Elena, flipándolo más todavía, pregunta que si después de todo lo que más importa es eso y Stefan contesta que es lo único que le queda. Entonces ella dice “Me tenías a mí”, pero él afirma que la perdió en el momento en que se fue del pueblo, simplemente que no se había admitido a sí misma el aceptarlo. Ya sabemos que en estado de negaciones, Elena tiene un master, sí, y puede que con esto Stefan o se esté refiriendo al hecho de que tras los meses de desenfreno, no puede retomar la rutina del mártir de la noche a la mañana (recordamos que Lexi tardó 30 años en una de sus crisis), o quizás esté aludiendo al delena aunque no haga mención explícita a ello (que podría hacerlo para variar, y cambiar su argumentación ya que antes sólo le motivaba rollo de culpar a Damon). Era inevitable que tras su partida, ellos se acercaran y no olvidemos que en el 3x06, durante la hoguera, Stefan vio celosa a Elena por la escena de su hermano con Rebekah, una prueba tangible 100%. Recuperar su humanidad no hace más que martillearle la conciencia porque sabe que lo tiene más negro que mi futuro. Por eso creo que habría estado curioso, y de paso veríamos que salida improvisada se le ocurre a Elena, pero vale, con lo que acaba de pasar no la meteremos más presión que se empana para adentro. La chica cree que todo lo que está haciendo es intentar que ella le odie y Stefan dice que ya no le importa lo que piense de él. De nuevo, voy a descogorciarme……. JA JA JA. Ya está. No he dicho nada en otros momentos de la conversación pero aquí tengo que explotar. Stefan, me recuerdas al Sawyer del 5x08 echando ese discursito a Horace, donde no es verdad de la primera palabra hasta la última (“¿Son 3 años suficientes para olvidarse de alguien? Por supuesto”). Has tenido varias caras en las que solamente te faltaba abrir el maletero del coche, coger la manta de cuadros para picnics y echarte a llorar en la cuneta. Que no te importa lo que Elena piense de ti no te lo crees ni jarto de mojitos de sangre. Sinceramente, no sé qué pretendes con estas salidas de mal gusto de transformaciones en puentes y mierdas varias, si es el que Elena abra los ojos (tampoco creo que tras el capi pasado hiciera falta), que te estaque o que como eres tan sacrificado y ves lo que te vas a comer dentro de… ya, en un futuro quieras tirarte el rollo vendiendo la baza de “no me sentía merecedor… por eso lo hice…” y demás verborrea a la que nos tienes acostumbrados. Podrías tener algo de estilo y educación para estas cosas, después de todo, eres el hermano bueno, digo yo. Ah no, que lo dijiste tú. Total, que coge el coche y ya si eso que Elena vuelva al pueblo a dedo. Esta es la escena desgarradora de la que Nina habló que no ha sido ni la mitad de lo que se suponía que sería, si acaso una décima parte. Pronto empieza a chochear esta mujer…
Klaus se presenta en casa de la sheriff porque Tyler le contó lo que pasó y el animalico estaba tan mal… su maestro ha venido a ayudar. Matt le espeta que él hizo que sucediera y el jula se las ingenia para que la madre le deje pasar a cambio de su apoyo. Me veo a Liz con dardos tranquilizantes buscando a Stefan por el pueblo en menos de lo que canta un gallo. Klaus entra en la habitación de Caroline y ella cree que va a matarla. “¿En tu cumpleaños? ¿Tan mal piensas de mí?”. Se supone que tú eras el original más temido, ser considerado en algo así es como esperar a que los políticos sean honrados. Claro, esta chica no te ha visto el lagrimal tan sensible que tienes, sino no te lo habría preguntado. Klaus se disculpa puesto que lo suyo era un daño colateral, nada personal. O sea, discierno que la orden a Tyler era para presionar a todos a que fuesen a Stefan a darle la chapa, y luego la curaría de todas formas. No sé, si su idea era usar a la rubia como intentó con Jeremy, no vendría mal que supiera que los guionistas han decidido omitir la relación Stefan-Caroline gratuitamente.
A continuación, le dice a la moribunda que tiene que ajustar la percepción del tiempo puesto que no es como la de los humanos, pero a Caroline le da lo mismo porque para lo que la queda. Entonces, Klaus dice de que a lo largo de su existencia ha pensado que su vida no tenía sentido una o dos veces (podría ser más consecuente con sus pensamientos y haberse guillotinado). Le da la oportunidad de escoger si vivir o morir, que puede conocer grandes ciudades, el arte, la música y tendrá todo, junto con mil cumpleaños. No es por menospreciar, pero esas cosas a Carol le importan cero, hubiera servido algo así de famosos, fiestas y despiporre. Lógicamente, Klaus habla con la pertinente congoja que le sigue haciendo más patético por momentos, pero que sirve para que Caroline opte por curarse. Más hachazos para las tyrolines, quienes se creían que todo el campo era orégano y Matt no valía un duro. Que os aproveche el jula.
Otra cosa de esas que omiten y son cagadas del sentido común, Damon por ciencia infusa fue a buscar a Elena al puente. Llegando a casa de ella, le pregunta que si va a estar bien y contesta que sobrevivirá, que de un modo u otro siempre lo hace. Entonces Damon, en lugar de tomar ventaja de la aberración que acababa de hacer Stefan, dice que puso a Klaus contra las cuerdas y eso les hizo tener un punto a su favor, aunque Elena prefiere que se meta sus métodos por donde le quepan. Pero Damon se siente un pelín orgulloso ahora que ha dejado de ser una plañidera ambulante. Vuelve a decirla que si estará bien mientras la coge la barbilla con la mano y previendo que después del 1 viene el 2… “No puedes besarme otra vez”. Ya estamos, cortando el tema al personal. Vamos a ver, hija, párate ya de ser siesa, que no cuela, y con esas caras menos. Venga vale, la reacción inicial es siempre la misma, no puedo evitarlo, me sale espontáneamente. Es cierto que el horno no está para bollos, y el propio Damon lo sabe. Elena sigue con lo que no puede, que no está bien, que la tiemblan las piernas y no sé qué historias más. Damon comprende la situación y decide no forzar la máquina, de momento. Baja las escaleras y Elena se mete para adentro, aunque esta vez mira cómo se va, no vaya a ser que le dé otra vez por darse la vuelta, que tiene que prepararse.
Al día siguiente, Jeremy está preparado para irse, despidiéndose de su hermana cuando llega Bonnie. Elena se huele que cascará por soleares pero no, simplemente le da un abrazo y ambas le ven marcharse. Me da lástima, un personaje menos al que criticar.
Recuperada, Caroline despierta y la herida del cuello ha desaparecido. En su mesita hay una caja rectangular negra con un lazo blanco. Regalo de Klaus, a ver cómo te comes eso sin que te entre disentería. Es otra pulsera, por lo que brilla bastante más cara que la de Tyler tiene que ser, pero lo más probable es que haya salido gratis como el resto de bienes que está obteniendo aquí el menda.
Vuelta al puente, donde Elena está con Matt reconociendo que se siente atrapada por estar aferrándose a la chica que debía haber muerto junto con sus padres, aquella con vida normal y que no se enamoraba de vampiros. Con S de Sevilla, plural, por si alguna elefan no lo tiene claro. Gracias. La suerte que tiene es que el pobre Matt está realmente out de todo esto y como si mezcla churras con merinas. Cerrando etapas, tiran unas florecillas al agua y Elena respira tranquila. Un momento necesario a pesar de que así en primera instancia me chocó ver a Matt. Supongo que relacionándolo con la antigua Elena, acepto la licencia.
En el Grill, Alaric toma un copazo tras mandar al emo a Denver, sumándosele Mederith, diciendo que su excusa para beber de día es que perdió un paciente. Sí sí, paciente. Es el pseudónimo para ex-novios que tocan las narices. El equipo de la sheriff acudió ante una llamada al bosque y junto con Damon ven el cuerpo. Él cree que lo que tiene clavado es una estaca pero Liz le dice que no es ni híbrido ni chupasangre. Un asesinato de los de toda la vida a un humano. Veremos que pasa con esta tía, que como en sus ratos libres tenga estas aficiones… ¡¡¡¡¡¡Alaric cárgatela!!!!!
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